Diocleciano fue el Emperador romano al que se le considera el Padre del Bajo Imperio, y, por tanto, de la forma de gobierno que perviviría en los reinos Europeos occidentales, y en el superviviente Imperio Romano de Oriente (Bizancio), durante toda la Edad Media, y, «grosso modo» hasta la Revolución Francesa, si consideramos que el «Dominado», o forma que adoptó la monarquía romana desde entonces, evolucionó a las «MOnarquías Absolutas» europeas.
Ya antes de cumplido su mandato, que terminaba en 305 según los pactos establecidos entre los 4 colegas «Tetrarcas», el Augusto, originario de estas costas de Dalmacia, comenzó la construcción de este «palacio-fortaleza» en la localidad ya conocida en griego como «Spalato», de discutida etimología, situada en una bahía que distaba unos 4 Km (menos de 3 millas romanas), de la ciudad romana de Salona, capital de Dalmacia.
Sin perjuicio de que, cuando concluyamos el mapa, compartiremos éste, con todo el aparato bibliográfico, científico y de investigación, que respalda nuestro ensayo de reconstrucción, la finalidad de los presentes vídeos es ilustrar al visitante sobre el desarrollo de las obras.
En este que inaugura la serie, llegamos al palacio desde el mar, describimos brevemente su concepción y visitamos lo realizado en primer lugar: su infraestructura, plasmada en la «planta terrena» a la que se accedía desde un embarcadero que salía directamente al mar Adriático.